La decoración de un piso

Enviado por Interdigital el Sáb, 12/08/2017 - 02:12
Cuando una persona se embarca en la tarea de decorar su propio piso lo primero que debe tener en cuenta es la distribución y el espacio disponible. Que las dimensiones sean reducidas en ningún caso será un problema, pues son muchos los trucos y técnicas que se pueden emplear para conseguir un efecto óptico de  mayor espacio y luminosidad que permite que las estancias resulten más grandes a simple vista. Escoger el color adecuado para las paredes es uno de los puntos de mayor importancia, así ha de optarse por colores muy claros en aquellas habitaciones pequeñas o en los pasillos, y otros más oscuros o vibrantes en las que resultan más amplias. Un gran punto de luminosidad se consigue con los techos en blanco, pues en ellos refleja la luz y permite una fluidez natural. Pueden combinarse con una greca de escayola, o bien, con una franja de unos6 centímetros de ancho para evitar las sombras o los contrastes bruscos si se trata de colores radicalmente opuestos. En lo que a carpintería se refiere se siguen las mismas premisas, tonos claros y oscuros en atención a la claridad disponible y al espacio. Una opción muy recomendable es emplear tonos vengué en el suelo si los techos resultan muy altos. Si no dispones de un gran presupuesto para decorar tus paredes con cuadros  puedes optar por fotografías personales impresas en distintos tipos de tamaños y en acabados en sepia o blanco y negro. Es una forma personal de personalizar la decoración del hogar sin apenas esfuerzos.

Pequeños detalles que hacen único un hogar:

Las flores naturales consiguen que parte de la naturaleza entre en los espacios de una casa, son muchas las opciones que podrás encontrar en el mercado, un sinfín de flores naturales, plantas de todo tipo… incluso, creaciones artificiales muy semejantes a las originales. Aportan elegancia en cualquiera de sus versiones y son una opción muy económica. Junto a ellas otro de los aspectos a tener en cuenta son los tejidos y menaje textil; colchas, cortinas, cojines… Los colores que se empleen en ellos han de ir acordes al resto de las tonalidades, es decir, si la pared está pintada en un tono claro la colcha elegida también debería serlo, no obstante, puede romperse con cojines en colores radicalmente opuestos. Son los detalles los que tienen licencia para romper la monocromía y resultar elementos absolutamente imprescindibles y llamativos.

La importancia de los espacios útiles.

Es fundamental disponer de espacios propios y diferenciados de los demás para llevar a cabo tareas propias del día a día de la persona, o lo que es lo mismo, si a una persona le gusta leer habrá que disponer de una pequeña zona acomodada a ese fin, compuesta por un sofá u orejero, así como de una estantería con todos sus títulos favoritos, de igual modo si, habitualmente, acaba su trabajo en casa habrá que pensar en una zona de trabajo adecuada con una mesa adaptada. Hacerlo será muy sencillo, antes de amueblar y una vez que ya se encuentre pintado el piso se piensa fríamente en todas las necesidades para, posteriormente, darle traslado a la realidad. En este punto tomar las medidas de un modo correcto resulta imprescindible por lo que es preciso prestar mucha atención a esta tarea.    En el mercado hay un sinfín de opciones adecuadas a cada necesidad, si no fuera así siempre se puede optar por profesionales que ofrecen creaciones a medida a muy buen precio y con resultados verdaderamente satisfactorios. Una de las zonas más utilizadas de la casa es, sin duda alguna la cocina, por esa razón ha de disponer de todo el espacio de almacenaje necesario, estar dotada de todo tipo de electrodomésticos, imprescindibles para cocinar en el día a día,  así como de mesa y sillas acordes con el número de personas que residen en la vivienda o de aquellas que habitualmente puedan venir de visita. En muchas familias resulta el verdadero epicentro de la casa por lo que la comodidad y utilidad son conceptos que nunca se han de descuidar en su diseño y elaboración. A este respecto se ha de anteponer la funcionalidad ante el diseño, o bien, intentar la combinación ideal de ambas. No olvides adquirir tu vajilla, cristalería, cubertería y juegos de tarteras y sartenes, si tienes oportunidad apuesta por la calidad, pues se trata de una inversión a largo plazo.

El último punto de la decoración son los elementos de calidez.

Si importante son las distribuciones adecuadas y los espacios útiles y versátiles también lo son aquellos elementos que dan calidez y sensación de hogar a la vivienda. Se trata de mantas suaves  que acompañan a los sofás, alfombras para vestir los suelos, velas de todo tipo… siempre pensadas para dar un toque singular y sentir que la persona se encuentra en su lugar soñado y anhelado.